El pelaje del westie la forman dos capas de pelo distintas en el exterior un manto de pelo duro y en el interior un manto más espeso de pelo más corto.
Es una raza que no muda el pelo porque se renovaba de forma natural al ser un perro de caza y engancharse y rozarse entre las zarzas el pelo se iba manteniendo.
Hoy en día es necesario llevar a cabo esos cuidados regulares de su manto para que no acabe lleno de nudos y de suciedad.